Liderando por la Paz | 27 de agosto de 2020
Gloria*, es una mujer bonaverense, quién se dedicó durante mucho tiempo a trabajar como mesera y en el servicio doméstico al cuidado de niñas y niños; sin embargo, ella no esperaba que las problemáticas sociales que habitan en su barrio afectarían a uno de sus cinco hijos.
“Entre mis hijos tengo uno de 19 años que se vio muy afectado tanto por la violencia como por la droga, siempre pongo lo que yo viví con él como ejemplo, ya que gracias a Dios uno va saliendo de todos esos problemas con consejos, dialogando, buscando ayuda y poniéndola en práctica“, comenta Gloria*, quién como persona protectora de niñas, niños, adolescentes y jóvenes, más el apoyo de su familia logró sacar a su hijo adelante “a uno como madre le duele cuando se entera que los hijos se vuelven consumidores de alucinógenos, es algo muy fuerte”.
Gracias a las acciones de Gloria, actualmente su hijo ha evidenciado avances notorios en su recuperación, esto la motivó a apoyar a otros chicos y chicas de su barrio, donde las principales problemáticas son la violencia causada por la presencia de bandas delincuenciales y la violencia intrafamiliar.
Así mismo, brinda información sobre los riesgos a los que se exponen las personas más pequeñas estando en la calle e incluso aconseja a algunos jóvenes que también son cercanos al consumo de drogas. “Vengo protegiendo a los niños desde que soy mamá, principalmente a mis hijos. Pero también a los que no son mis hijos y a los que veo vulnerables. Los niñas, niños, adolescentes y jóvenes son el futuro de un mañana y es necesario protegerlos desde ahora para que ellos puedan proteger a los otros que vienen creciendo”, expresó Gloria.
Estas situaciones de violencia en Colombia han destruido familias, impactando en la vida de muchas personas en distintas zonas del país. De acuerdo con la Oficina del Alto Comisionado de la Organización de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH), se han documentado 33 masacres durante el 2020, de las cuales niñas, niños, adolescentes y jóvenes han sido víctimas.
Por su parte, la red de sociedad civil que involucra a más de 700 organizaciones que trabajan directamente con esta población; denominada Alianza por la Niñez Colombiana, registró 245.650 personas que desde enero del 2015 a junio de 2020 perdieron la vida o fueron lastimadas. Cifras que alarman y que invitan a continuar en la defensa de los derechos y la protección de las y los colombianos. Tal como el trabajo mancomunado que realiza Fundación PLAN con las comunidades en su apuesta por fortalecer entornos protectores principalmente en Tumaco, Quibdó y Buenaventura; a través del Programa Liderando por la Paz.
“Ser Figura Clave de entornos protectores, me ha brindado muchos sobrinos, porque ya no son mis vecinos, pues siempre estoy en ese rol de cuidarlos, aconsejarlos y me gusta lo que hago”. Para Gloria su proceso con Fundación PLAN ha sido muy importante porque comenta que ha aprendido sobre los valores y resolución de conflictos que han favorecido su convivencia familiar; de hecho, su hija Mirian* de 13 años también es Figura Clave, y participa de las “Juntanzas” como es llamado el encuentro en el que se da el intercambio de saberes en atención y respuesta ante los diferentes tipos de violencia, por medio del dialogo para fortalecer el tejido social.
Mirian cuenta que su madre ha cambiado desde que es una Figura Clave “antes de entrar al Programa era una persona decaída, un poco triste y ahora la veo como una persona distinta con una sonrisa que irradia felicidad… en la familia la apoyamos todos y yo la acompaño” concluye.
Gloria y Mirian actualmente participan de las Juntanzas a través de plataformas digitales, las cuales han posibilitado que desde el Programa se brinde herramientas prácticas que apoyen su labor no solo en temas de protección sino también, el acompañamiento se encamina a informar sobre los protocolos de bioseguridad y herramientas de prevención por la emergencia sanitaria producida por el COVID-19.
De esta manera Fundación PLAN a través de su programa Liderando por la Paz, el cual es financiado por el Gobierno de Canadá e implementado en asocio con la Unidad para las Victimas, contribuye en la construcción de culturas de paz en las que a partir del fortalecimiento de capacidades de atención y respuesta en las comunidades se promueva la defensa de los derechos de niñas, niños, adolescentes y jóvenes del Pacífico colombiano.
*Nombres adaptados por protección.