La tristeza es una emoción que consiste en una sensación de pérdida, dolor, a menudo acompañada de llanto. Para los niños y niñas la tristeza se acompaña de un deseo de alejamiento, aislamiento y pasividad; es un sentimiento que a veces no se manifiesta abiertamente, pero al cual, como padre o madre, debes poner atención. La tristeza requiere que le dediques un tiempo para sentirla, para llorar, para echar de menos lo que se ha perdido.
Tus hijos e hijas pueden afectarse por muchas situaciones y sentirse tristes; por ejemplo, por el modo como están siendo tratados y tratadas, por los deseos no satisfechos, por la pérdida de su mascota, por la ausencia de un ser querido. A continuación unos consejos prácticos para entender cómo manejar la tristeza de ellos y ellas.
- Es importante validar y respetar el sentimiento de tristeza infantil.
- Si tú conoces el motivo de la tristeza, a veces la sola compañía y un abracito hacen
que se sienta mejor. - Si desconoces el motivo de la tristeza, anímale a que hable de lo que le está produciendo tristeza. Cuéntale que algunas veces tú también te sientes triste.
- Igual que con las otras emociones de las que hemos hablado en anteriores entregas, tú puedes pedirle que pinte la situación que le causa tristeza o dibuje una carita triste, y luego pregúntale por qué cree que está triste la carita.
- Pídele que te muestre en dónde está ubicada la tristeza, qué color tiene, si es fría o caliente, grande o pequeña, a qué se le parece.
- Haz que respire profundo, imaginando que con el aire sale toda la tristeza y que se la lleva el viento.
Recuerda: Cada persona experimenta las emociones de forma particular, según sus experiencias, aprendizajes, carácter y situación concreta. Cómo las interpreta cada persona y cómo reacciona depende de estas diferencias individuales. Las emociones van acompañadas por expresiones de la cara y reacciones físicas del cuerpo. Recuérdate y recuérdale a tus hijos e hijas que no es malo sentir, lo importante es saber qué hacer con
ese sentimiento para no causarte daño a ti ni a los demás.